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Los diamantes de sangre entran en las redes sociales

martes 27 de junio de 2017, 07:00h
Los señores de la guerra siguen controlando buena parte de las zonas productoras en Centroáfrica. Foto: Global Witness.
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Los señores de la guerra siguen controlando buena parte de las zonas productoras en Centroáfrica. Foto: Global Witness.
Una operación ‘encubierta’ de la ONG Global Witness ha puesto de manifiesto cómo los traficantes de diamantes de República de Centroáfrica están saltándose a través de Facebook el embargo que pesa sobre la mayor parte del país para lucrarse con el comercio ilícito de diamantes de conflicto.

En una clara referencia a la popular serie ‘Juego de Tronos’ (Game of Thrones), la ONG acaba de presentar el informe ‘Game of Stones’ (Juego de Piedras) en el que un representante de la organización ha actuado durante más de un año como supuesto comerciante de diamantes para ganarse la confianza de los traficantes.

El informe desvela cómo los vendedores y los intermediarios están captando potenciales clientes de forma abierta a través de Facebook y posteriormente continúan la comunicación por mensajes privados en esta red y también por el conocido Wassap para cerrar los acuerdos y llevar a cabo la venta de diamantes en bruto de dudoso origen y, por supuesto, sin el obligado certificado de Kimberley.

“En un país pobre y frágil, donde la enorme riqueza de sus recursos naturales debería estar en manos de su población, lo cierto es que la mayoría de ese beneficio va a parar a aquellos que siguen alimentando el conflicto”, aseguran desde la Organización.

Esfuerzos en vano desde Kimberley

La República Centroafricana representa exactamente el motivo por el que nació el proceso Kimberley en su momento”, aseguran desde la ONG, “pero muestra también su ineficacia a la hora de atajar el tráfico de diamantes”, añaden.

Precisamente este es el principal motivo por el que Global Witness lanza esta alerta: Poner de manifiesto la falta de efectividad del embargo que el Proceso Kimberley estableció en 2013 (con el inicio de la solapada guerra civil) y también alertar sobre la necesidad de que las grandes firmas comerciales y las manufacturas del diamante (corte y pulido) internacionales no dejen de mirar para otro lado.

Porque esa es una de las claves del conflicto. Si los diamantes siguen saliendo del país por innumerables vías es porque hay compradores que los demandan y una industria que los manufactura sin hacer demasiadas preguntas. “Sin un compromiso y una mayor responsabilidad del mercado internacional, todo esfuerzo será en vano”, explican desde Global Witness.