El Instituto Gemológico de América (GIA) da la voz de alarma sobre la recepción de un diamante de tres quilates enviado a su laboratorio de Amberes que venía con la incripción duplicada de un diamante natural ya registrado previamente en el laboratorio. “La mayoría de los diamantes sintéticos recibidos tienen mayor claridad y sus medidas y pesos eran casi idénticos a los informes de GIA a los que se hace referencia en las inscripciones falsificadas” tal y como acaba de remitir la entidad en una nota.
Este ejemplo más reciente, presentado en Amberes, de un diamante sintético con una inscripción falsificada
destaca lo cerca que están las medidas de la piedra artificial a la información del informe original. El informe que acompañó a la piedra enviada para una actualización fue de 3.078 quilates, 9.33 x 5.74 mm,
Internally Flawless, color G, marcado con triple
excelent.
La piedra recién presentada era
un diamante creado en laboratorio de 3,075 quilates que medía 9.39 x 5.76 mm, VVS2, H, con una marca triple excelente. A primera vista, los diamantes naturales y creados en laboratorio descritos anteriormente son casi idénticos;
las medidas estaban a solo centésimas de milímetros entre sí."Esta desafortunada situación demuestra por qué es importante, especialmente en cualquier transacción en la que el comprador no tiene una relación de confianza con el vendedor, tener actualizado el informe de clasificación de diamantes antes de completar una compra", dijo Tom Moses, vicepresidente ejecutivo y director de GIA.
El pasado mes de febrero la GIA informó un incidente similar, esta vez con varios diamantes naturales tratados enviados para servicios de actualización o verificación con inscripciones de números de informes falsificados.
