La crisis global del coronavirus ha provocado un severo parón en la demanda de oro para la fabricación de joyería y en el tercer trimestre de este año se contabilizó un consumo de 333 toneladas, un 29% menos que en el mismo periodo del año anterior, según las estadísticas del Consejo Mundial Oro (WGC).
Esta drástica caída en la demanda del metal es el reflejo de un parón que no ha podido ser mitigado por el auge de una venta online que, pese a su impulso en estos últimos siete meses, no consigue equipararse a la tradicional demanda física.
Las causas del descenso son más que evidentes: Una “combinación de restricciones de distanciamiento social continuas en muchos mercados, la desaceleración económica y un precio récord del oro” apuntan desde el Consejo del Oro.
Francia, con un consumo de 2 toneladas de oro para joyería, consigue crecer un 4% y es el único país del mundo que logra cerrar el trimestre en positivo
Y además esta situación ha incidido aún más profundamente en los países del sur de Europa, tal y como indican las estadísticas. España compró 1,5 toneladas de oro en el tercer trimestre, lo que supuso una caída del 26% respecto al año pasado, mientras que el descenso en Italia fue pronunciado, aunque menor, con un consumo de 2,4 toneladas tras una caída del 15%.
“El colapso del turismo, unido a la reducción de ceremonias tradicionales como bautizos, primeras comuniones y bodas” han sido las principales causas de la caída en el arco mediterráneo, tal y como apuntan desde el Consejo.
El dato más curioso lo apunta Francia que, con un consumo de 2 toneladas de oro para joyería, consigue crecer un 4% respecto al mismo periodo del año 2019 y es además el único país del mundo registrado en el informe del WGC que consigue crecer durante el tercer trimestre de este año.
Crecimiento significativo del oro para inversión
Y como nunca llueve a gusto de todos, el alza en los precios del metal y las malas expectativas a medio plazo siguen mirando al oro como refugio de la inversión y esto se ha notado en la demanda de oro de este tipo, aumentando un 21% durante el tercer trimestre.
En total se destinaron a este propósito 221 toneladas en forma de monedas y lingotes, además de otras 272 toneladas adicionales en fondos cotizados respaldados con oro (EFTs). En lo que va del año, los ETFs de oro han aumentado hasta un récord de 1.003 toneladas según esta misma fuente.
