La baja del grupo Swatch supone que sus 18 marcas dejarán de estar presentes en la feria pero también crea un serio precedente para el desarrollo de esta feria, ya que nadie puede calcular el ‘efecto llamada’ que producirá la ausencia de la que probablemente es la firma más icónica de la relojería suiza. Las razones: “falta de innovaciones y el escaso retorno de la inversión”, explica el grupo.
Y es que el grupo pone también en entredicho el propio concepto del evento ferial: “hoy todo se ha vuelto más dinámico e instantáneo y, en este contexto, una feria anual tal como la conocemos actualmente carece de sentido” explican desde Swatch.
Otro de los motivos es sin duda el económico. El grupo entiende que estar presente en una feria de estas características le supone una costosa inversión muy difícil de recuperar. Según publican varios medios internacionales ese enorme despliegue de medios y personas durante los seis días del evento conlleva una inversión en torno a los 50 millones de dólares.
La compañía añade que no “descarta” volver al evento en ediciones futuras pero de momento se mantendrá a la expectativa. “Las feria no van a desaparecer pero deben reinventarse y adaptarse a un entorno más dinámico y creativo” añaden.
La feria ‘lamenta’ la ausencia de Swatch
Tal es el calado de la noticia que la organización de la feria se ha visto obligada a emitir un comunicado en el que “lamenta” la decisión del grupo relojero y recuerda que esta se produce precisamente cuando acaba de llegar un “nuevo equipo, con un nuevo espíritu y muchas nuevas ideas” para el evento.
Cabe recordar que Baselworld ya sufrió en la edición de este año el mayor recorte de su historia. De los habituales 1.300 expositores se pasó a unos 650 y de 8 días de duración se acortó a seis por las demandas de los clientes y por los desorbitados precios que alcanza el alojamiento en Basilea durante los días de feria, entre otras razones.
En la nota que acaba de publicar la feria se destaca también que el nuevo director de eventos Michel Loris-Melikoff, que sustituyó el pasado 1 de julio a Sylvie Ritter tras 15 años en el cargo ya ha puesto en marcha “un intenso plan de actuaciones” para devolver el ‘brillo’ a la que, con todo, sigue siendo la primera cita mundial de la relojería.