Buen pulido. Si te fijas con una lupa gemólogica 10x, no deberias de ver rayas de pulido que son paralelas y se producen por la fricción del abrasivo del disco con la faceta en su giro constante y estando situada la piedra en la misma posición.
Se producen cuando el tallador no utiliza los abrasivos adecuados el tallador en cada etapa del pulido. Tampoco deberías de ver las abrasiones en las facetas, estas marcas se producen por una excesiva presión de la piedra con el disco de pulir, en muchos casos puede producir microfisuras, como por ejemplo los filetínes "barbudos" de los diamantes, es decir el tallador no ha tenido suficiente cuidado, no se ha esmerado, se ha producido demasiada fricción.
Diferentes gemas con tallas en cabujón
Bien cuidada, sin maltrato. No deberiamos de ver melladuras, desportilladuras, fracturas a nivel de superficie, rayas de maltrato. Esto se produce por un mal cuidado de la piedra, puede ser que estuviera junto con otras piedras de diferente dureza y simplemente la fricción entre ellas puede producir las melladuras en las aristas o desportilladuras.
En otros casos las fracturas, generalmente concoideas, excepcionalmente por exfoliación, se producen por caídas de la piedra, o por un mal engastado en la joya, bien porque se fricciona con otra o porque el engastador al ajustar las garras ejerce excesiva presión y puede producir fracturas o melladuras y exfoliaciones.
Otros casos son las piedras desengastadas de joyas que se vuelven a incorporar al mercado, pero que en numerosas ocasiones los vendedores apremiados por una rapidez en la venta, no se fijan que la piedra al haber estado montada y en propiedad de una persona poco cuidadosa, suelen tener desportilladuras en las aristas, melladuras por golpes o incluso fracturas.
En piedras importantes es mejor retallar y pulir de nuevo para dejarla como nueva a estrenar, aunque se pierdan unas centésimas en el proceso. En otros casos puede haber melladuras naturales que se producen al facetar la piedra y dejar al descuebierto huecos naturales o fisuras.
Viveza de aristas: este detalle requiere un ojo entrenado cuando observamos una piedra tallada con una lupa 10x. La viveza de la arista, el que veas una linea casi cortante, viva, quiere decir que se trata de material con bastante dureza, yo diría 6,5 de la escala de Mohs hasta 10. En materiales de dureza inferior puedes observar aristas de canto romo o redondeado.
Buena simetría: este dato se refiere a la ordenación perfecta de las facetas, de las aristas, que todas las del mismo tipo sean iguales, que aristas y vértices se encuentren, que las aristas de la corona coincidan con las de la culata, que el filetín sea uniforme en anchura en todo su recorrido, que sea facetado, pulido o esmerilado, pero no una mezcla de ellos como he visto en muchos ejemplares.
Que las tablas que son poligonales, sean un polígono regular, no deformado. Que todas las facetas que son similares, sean iguales en tamaño y dispuestas simétricamente. Que el culet esté en el centro, en la vertical desde el centro de la tabla, que las culatas no estén desplazadas, esto se propuce debido a que los talladores para aprovechar el material en bruto al máximo desplazan el culet no por capricho sino para ir a donde está el material y que pueda pesar mas la piedra.
Gemas facetadas
Proporciones adecuadas. Este dato es muy importante y tiene que ver con la "vida" de la piedra. Yo le llamo "vida" a que una piedra por las proporciones adecuadas de su talla y al tener mucha transparencia, cuando le entra la luz se produce la refracción de la misma y vuelve a salir hacia arriba, hacia la posición del observador.
Cuando iluminamos una piedra y vemos que devuelve mucha luz, por el reflejo en sus facetas internas, decimos que tiene mucha "vida" y esto quiere decir que está proporcionada. Los ángulos de la culata y corona con el plano del filetín tienen que ver con el índice de refracción de la piedra y como este es diferente según la gema, es por eso que las culatas y coronas cambian en altura y profundidad según sea el índice de refracción de cada gema.
Cuando hablamos de proporciones en porcentajes, estamos diciendo que si el diámetro de una piedra es el 100% , la altura de la corona tiene que ser de un 14%, la de la culata de un 45% , el grueso del filetín un máximo de 4,5% y el culet un 1% estas serían las proporciones ideales en una talla brillante calificada como "excellent" hablando de un diamante.
Precisamente la talla Brillante" la más conocida, la que se emplea para el diamante mayoritariamente y para otras piedras, es lo que hace que si decimos un "brillante" estamos hablando de un diamante talla "brillante" es la más difundida. Hablaremos de esta talla más adelante.
Manuel Llopis es gemólogo y director del Laboratorio Gemológico MLlopis de Valencia. www.gemologiamllopis.com
Pincha aquí si te perdiste el primer artículo de la serie ¿Conoces los nombres de las tallas de las gemas?