El proyecto ganador se llama
Tree of Life 2 y es
un gran recipiente de madera elaborado a partir de un roble de más de 300 años que cayó fulminado por un rayo y que el artista recuperó para convertirlo en este homenaje a la naturaleza y al arte del diseño.
En esta edición
se ha dado también la circunstancia excepcional –ya que no estaba previsto—de otorgar menciones de honor a otros dos finalistas: el japonés Yoshiaki Kojiro y su obra
Structural Blue, recipiente hecho en polvo de vidrio y óxido de cobre; y a la firma mexicana Artesanías Panikua, de una familia indígena que elabora formas a partir de fibras de trigo.
Un premio suculento y gira mundialEl ganador recibirá los 50.000 euros del premio y un trofeo elaborado por el platero británico Álex Brodgen. A partir de hoy comenzará una gira mundial con todas las piezas finalistas que se inicia ayer en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, donde estarán expuestas hasta el próximo 10 de mayo y posteriorente recorrerá las salas de exposiciones de Nueva York, Tokio y Londres.
La firma ya ha comunicado que
las bases para la edición 2018 del Loewe Craft Prize estarán disponibles a partir del próximo mes de junio.