El galardón es fruto del reconocimiento a una larga trayectoria profesional repleta de éxitos. Un galardón a la creatividad, a la pasión por los materiales, la innovación y el tesón de un auténtico artista de la joyería.
Cada una de sus piezas es única por el lenguaje expresivo de formas, con el que demuestra el gran amor que tiene por los materiales y el arte. Su inspiración procede de la naturaleza y su gran desafío es introducir las formas en sus diseños haciendo de ellos un solo elemento.
Convierte sus ideas gráficas en creaciones únicas que intensifican la expresión de cada piedra individualmente
Michael Zobel define su joyería como “la pintura con metal y piedras preciosas” ya que convierte sus ideas gráficas en creaciones únicas que intensifican la expresión de cada piedra individualmente. El propio autor explica que el uso de materiales no convencionales le ha permitido crear objetos únicos, siendo este su estímulo y la demanda en su trabajo creativo.
Se trata de un creador cosmopolita y viajero. Nació en Tánger (Marruecos) en 1942 y creció en Barcelona, donde aprendió la profesión de orfebre (1958- 1961).
Posteriormente estudió un grado en arte en la Escuela de Diseño de Pforzheim (1961- 1964) y a partir de 1965 trabajó como diseñador de joyas en el estudio de Henry Denys en Francia.
Aclamado internacionalmente
Su arte es reconocido mundialmente. Ha sido miembro de Aspects, un grupo muy aclamado de diseñadores de joyas. Sus numerosos premios internacionales demuestran que lo que él hace es “arte mundial” ya que, se considera un referente de la joyería en todo el mundo por sus diseños y la alta calidad de los materiales.
Desde hace varios años ha participado en un proyecto internacional apoyado por la UNESCO llamado "La Gran Ruta de la Seda: un Diálogo entre Oriente y Occidente", que organiza exposiciones en varias ciudades de Asia y Europa.
Al final, Michael Zobel ha acabado siendo aquello que quería ser: pintor, pero de metales y piedras
Actualmente se dedica a viajar por el mundo y a dar conferencias sobre sus experiencia profesional en universidades, simposios internacionales y reuniones de gemología y diseño de joyas. Al final, Michael Zobel ha acabado siendo aquello que quería ser: pintor, pero de metales y piedras.