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OPINIÓN | MANUEL LLOPIS

¿Qué debo saber de mis joyas?

martes 15 de noviembre de 2016, 07:00h
A mi me gustaría que cuando compras una joya, además de que te den la factura que podrá servirte para el seguro en caso de robo, que informaran de como es la joya que estoy comprando. Cuando compro una camisa veo una etiqueta que me dice quien la ha fabricado, que tejidos la componen, a que temperatura debo de lavarla, si le puedo hacer o no un centrifugado, si admite secadora, los cuidados con la plancha, etc. esto no pasa cuando compro una joya, ¿por qué?.
Certificado gemológico emitido por el GIA.
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Certificado gemológico emitido por el GIA.

Estaría bien que con la joya te informaran de qué metales está compuesta, oro, plata, platino, oro blanco, de qué pureza, 18, 14 quilates, 925, 950 milésimas, si lleva un recubrimiento o baño de rodio, rutenio o dorado. Hay que tener cuidado con ciertos recubrimientos procedentes de paises asiáticos porque llevan metales que son cancerígenos, y que con el roce en la piel pueden producir eccemas. Muchas piezas de importación no pasan los controles de los Laboratorios de Análisis de Metales de las diferentes Comunidades Autónomas.

Sería genial que me ilustraran de como está realizada, si se ha hecho con un proceso artesanal manual, o mecanizado, si está realizada por procesos de moldes o de fundición, digo esto porque lógicamente no vale lo mismo un proceso mecanizado que uno manual, no es lo mismo una pieza de molde que una pieza única artesanal.

Una joya puede ser una pequeña obra de ingeniería, con muchas horas de trabajo, realizada por un artesano, un artista. Piezas pequeñas, ensambladas, articuladas, que pueden dar movimiento, que se te acopla a la muñeca en el caso de pulseras, al cuello en el caso de collares.

He visto joyas que traen los clientes para su valoración y al estudiarlas, les contamos que su pieza es desmontable o que se puede convertir o que tiene doble uso, etc. los clientes se quedan asombrados porque no lo saben, en ningún momento se lo dijeron. Nadie te explica el trabajo que hay detrás de una joya, el proceso y transformaciones que tiene hasta convertirse en una pequeña obra de arte.

Si tu joya lleva piedras, es importante que te expliquen los tipos de engastados que han empleado en colocarlas, un acabado de engaste en chatón no es lo mismo que uno con pestañas, con estas se pueden producir enganchones con la ropa si no está bien hecho y además se hace para abaratar, tiene menos trabajo.

No es lo mismo un preengastado en cera, es decir colocar la piedra en la misma pieza de cera que ha salido de un molde y luego por procesos de microfusión o cera perdida, la piedra ya queda colocada, pero..., eso no es artesanía. No es lo mismo un ajuste que ya sale de molde que un ajuste manual.

El engastador es otro artesano que esculpe el metal para que las piedras queden integradas en la joya. Ajusta garras y monturas para que las piedras no se muevan. Un buen engastado, si además las piedras tienen belleza, es el remate final de una joya y si está mal hecho puede arruinar el trabajo. Garras demasiado largas, garras que montan por encima de las piedras, granos mal colocados, sin simetría... o por el contrario lo realza.

Nadie te explica el trabajo que hay detrás de una joya, el proceso y transformaciones que tiene hasta convertirse en una pequeña obra de arte

Pasa lo mismo con los grabados en relieve o semirelieve, ¿están hechos por un grabador artesano o ya salen en el molde?, si esto te lo explican, ayuda enormemente a entender porque una pieza puede valer mas que otra.

Con las piedras de las joyas pasa lo mismo, ¿que piedra es?, ¿es natural o es sintética?, su color ¿está tintado o es natural?, ¿como sé si me están diciendo correctamente los nombres de las piedras?, ¿hay un informe gemológico firmado por un gemólogo?. Si hablamos de diamantes me gustaría que me dijeran el estilo de talla, los quilates de peso de la piedra principal y los del resto, qué color y qué pureza tienen.

Si la piedra principal ya es de cierto tamaño, ¿le acompaña un certificado?, ¿tiene las proporciones correctas? ¿y el pulido y la simetría de su talla? ¿como son?. No vale lo mismo, a igualdad de talla, de peso, de color y de pureza de un diamante uno que tiene malas proporciones, mal pulido que otro que las tiene correctas con buen pulido y buena simetría.

Con respecto al mantenimiento de las joyas, su limpieza y conservación, noto que no hay información al cliente para que las sepa cuidar. Sería recomendable que informaran si la pieza se puede poner en agua caliente con desengra-santes suaves y cepillar con un cepillo de filamentos blandos.

Se necesita saber si una pieza se puede poner en ultrasonidos, en alcohol, en lejía, o en disolventes, porque no todas las piedras lo admiten. Muchas de ellas son porosas y pueden cambiar de tono de color, otras no admiten disolventes como por ejemplo las esmeraldas porque por lo general todas llevan un tratamiento de relleno de aceite incoloro que mejora su transparencia.

Este tratamiento está admitido por la CIBJO, pero si la pones en disolvente o ultrasonidos se le puede ir y su aspecto cambia a peor. Hay otras piezas que llevan pegamentos que se pueden reblandecer al ponerlas en agua muy caliente, es mejor desmontar las piedras pegadas, sanear el pegamento, limpiar la pieza y luego volverla a pegar.

Con los collares de perlas o cuentas , según el uso que se les de, es recomendable enfilar de nuevo cada cierto tiempo, después de haber quitado el hilo viejo y limpiado las cuentas. Es mejor no lavarlos con el hilo porque si se queda agua en los taladros se pueden pudrir los hilos.

Se debe recomendar a los clientes que cuando se quiten la joya la guarden en su estuche, evitando el roce con otras, ya que no todas las piedras tienen la misma dureza y unas pueden rayar a las otras simplemente por contacto y pierden su lustre.

Si yo fuera el joyero de los clientes, les aconsejaría que periódicamente traigan sus joyas para revisar las monturas y evitar esas piedras que se mueven, ajustar garras. Los cierres hay que repasarlos y ajustarlos para que no pierdan su elasticidad y la función para la que están hechos, conviene revisar resortes, mosquetones, cierres de pato, presiones de orejales de pendientes, palas y omegas, y pulir los anillos y sortijas que pierden lustre por el uso y roce.

Manuel Llopis es gemólogo y director del Laboratorio Gemológico MLlopis de Valencia. www.gemologiamllopis.com