La entrada de diamantes sintéticos en el mercado, especialmente los que se sitúan en la gama media-baja de 0,001 a 0,2 quilates, están empezando a crear complicaciones a la industria por su dificultad para diferenciarlos de los naturales porque estos tamaños tan pequeños no suelen analizarse. La Confederación Joyera Internacional (CIBJO), debatirá en su próximo congreso la forma de conciliar ambas opciones.
La Comisión del Diamante de CIBJO será la encargada de conducir el debate que se celebrará en una de las sesiones de su congreso anual. Y ha elaborado un informe especial para identificar las causas y aportar soluciones junto al resto de agentes de la industria.
La Asociación propone aumentar la investigación en el desarrollo de diamantes sintéticos de calidad gema y también en los instrumentos y métodos de detección, por otro lado, para no poner en peligro la integridad del mercado.
Pero también plantea una cuestión ética. Y es que, según CIBJO, entre los intermediarios hay alguien que "mezcla" deliberadamente ambos tipos de diamantes, vendiéndolos como si fuesen naturales. Por eso propone también sanciones contra las empresas que no informen adecuadamente y también métodos de marketing que permitan a los consumidores distinguir entre naturales y sintéticos.