El Classics Heart Beat Moonphase Date de Frederique Constant de hace ocho años vuelve hoy a la actualidad con un modelo en línea.
La cuerda, las horas, los minutos, la fecha y el ajuste de las fases de la luna se realizan con una única corona
El último lanzamiento contiene una caja de 40 mm, y a las 12 horas se encuentra la expresión de la maestría relojera que ha caracterizado a Frederique Constant desde sus inicios.
Viene accionado con el movimiento mecánico automático FC-335, con una cadencia de 28.800 alternancias por hora.
La fecha se ajusta en la segunda posición y las fases de la luna en la tercera, siempre que las agujas se hayan colocado antes a las 10:10, para no dañar el mecanismo.
Con la abertura Heart Beat, a las seis horas, se desarrolla una fase lunar. La fase lunar recuerda, junto con el historiador Dominique Fléchon, que "la relojería es hija de la astronomía", y que las primeras mediciones del tiempo se hicieron observando las estrellas.
En el centro de la esfera se encuentra cuatro agujas, las dos primeras; las de las horas y los minutos, terminan con un motivo llamado “ponme évidée”, al estilo Breguet. La segunda; la de los segundos, supera la medida del movimiento automático FC-335 ofreciendo 38 horas de reserva de marcha y visible a través del fondo de zafiro.
La última aguja señala la fecha, indicada de forma circular en el realce. El conjunto viene con una correa de piel azul y pespuntes blancos y se cierra con una hebilla ardillón de acero.