Para poder determinar la calidad de una gema debemos analizar los parámetros color, pureza, talla y peso

El tratamiento de relleno de fisuras es uno de los más comunes que podemos encontrar los gemólogos, que se utiliza principalmente para mejorar la transparencia de la gema. Sin embargo, dependiendo del tipo de relleno que se haya utilizado para ello, la gravedad del tratamiento varía enormemente. Un relleno de fisuras con sustancias no vítreas es el más común (con aceites, resinas, polímeros…), no se considera grave y puede encontrarse en prácticamente cualquier gema. No obstante, cuando en un relleno se detecta que la sustancia es vítrea sí se considera un tratamiento grave, puesto que estas sustancias no son estables (vidrio de Pb, Yehuda...).

En el laboratorio, al observar al microscopio una gema, podemos detectar la mayoría de tratamientos que se aplican a las mismas. Cuando se detecta un tratamiento de relleno de fisuras con sustancias vítreas, al ser un tratamiento grave, nos vemos obligados a informar al cliente inmediatamente de manera específica sobre ese tratamiento.

En el caso de los diamantes, este tratamiento de relleno de fisuras con vidrio se denomina tratamiento Yehuda. Estos diamantes no deben certificarse, ya que el vidrio puede hacer que varíen los parámetros de color y pureza con el tiempo.

La detección de los tratamientos tipo Yehuda se puede hacer a simple vista, cuando es muy evidente, o con el microscopio. Se identifica fácilmente porque se produce un destello en las fracturas donde el color cambia de rosa a púrpura o azul y viceversa. Este destello es denominado “efecto flash”, y es consecuencia de la diferencia de los índices de refracción del vidrio y del diamante. En otras ocasiones, el efecto flash no es tan claro y no se puede determinar con tanta facilidad si un diamante tiene este tipo de relleno o no.

A veces podemos observar inclusiones con morfología dendrítica que puede ser típica también de los rellenos de fisuras, pero en estos casos no tenemos la certeza total de que se trate de un relleno de fisuras o simplemente una fisura sin relleno alguno.

Cuando tenemos sospechas sobre un posible relleno de fisuras con sustancias vítreas que no podemos confirmar con nuestros equipos de laboratorio, debemos utilizar un espectrómetro de fluorescencia de rayos X.

En la Facultad de Ciencias Geológicas de la Universidad Complutense de Madrid se encuentra el Centro de Asistencia a la Investigación (CAI). En el CAI disponen de aparatos especializados para el análisis de minerales y rocas. Entre ellos cuentan con el aparato de espectrometría de fluorescencia de rayos X (imagen 2), que es el que nos interesa para nuestro análisis.

En el momento en el que tenemos sospechas de rellenos vítreos en un diamante que no podamos confirmar con ningún medio disponible en nuestro laboratorio, nos ponemos en contacto con el cliente para pedirle su autorización y trasladarnos personalmente con el diamante al CAI para su análisis. Una vez llegamos al centro de investigación el técnico recibe la gema y, a continuación, se introduce la misma en un recipiente cubriéndolo con un plástico especial y se introduce en el equipo de fluorescencia de rayos X para que haga las mediciones correspondientes, y comprobar si efectivamente nuestras sospechas son o no correctas.

Este aparato se basa en la respuesta que genera la muestra cuando se le hacen incidir rayos X de diferentes intensidades. Los rayos X son transformados en señales eléctricas por el aparato y así quedan representadas en un gráfico o espectro en el ordenador (imagen 3). Una vez la muestra ha sido analizada por el equipo, se interpreta el espectro que ha generado y se observa si presenta elementos que componen los rellenos vítreos, como el Pb, Bi o Sb.

Si se observa la presencia de alguno de estos elementos, se confirmaría que el diamante en cuestión sí presenta relleno de fisuras con sustancias vítreas.

Una vez realizado el análisis de fluorescencia de rayos X en la muestra, si el diamante no presenta rellenos vítreos de fisuras, continuamos analizándolo en nuestro laboratorio para obtener los parámetros de calidad y realizar el correspondiente certificado gemológico.