La colección The Enchanted Garden representa "un nuevo hito en las habilidades de la marca en cuanto a la creación de flores", según explican desde la firma. Los pétalos se elaboran a mano y de forma individual para lograr una reproducción fiel, dando como resultado unas flores "casi reales".
Las piedras preciosas, también incrustadas a mano, incluyen zafiros, rubelitas, amatistas, cuarzo rutilo, diamantes, esmeraldas, ópalos de fuego y peridotos. Cada flor está disponible en dos acabados distintos: una con pistilos y tallos de oro de 18 quilates, y otra con estos elementos realizados en plata de ley 925; y chapado en oro de 24 quilates.