Con diferencia, el azul ha sido sin duda el color estrella de la temporada, tanto en tamaño como en precios. En el mes de abril, una piedra azul de 8.01 quilates alcanzó en Sothebys Hong Kong la friolera de 12,7 millones de dólares. En otra subasta de Sotheby's en Ginebra, otro diamante azul, esta vez de 10.48 quilates, llegó hasta los 10,86 millones de dólares. Finalmente, otro diamante de este color, de corte marquis y montado sobre un anillo de Tiffanys, se vendió en Nueva York por 2,43 millones de dólares.
Pero el azul no ha sido el único color de moda. Los diamantes amarillos y rosas han sido también las estrellas de la temporada. También en abril, un diamante amarillo de 23.02 quilates se vendió en Sothebys por 1,87 millones, mientras que otro de 23,79 quilates alcanzó los 1,2 millones en la casa Phillips.
En cuanto a los color rosa, a comienzos de este mes una piedra de 6,54 quilates se vendió en Nueva York por 8,6 millones de dólares, mientras en Hong Kong, otro rosa, certificado de claridad VS1, se vendió por 17,48 millones de dólares.
Además de los colores puros, las gemas con tonos como el rojo-anaranjado, o rosa-marrón, también alcanzaron cifras de record en las subastas. Como también los transparentes. De hecho, la pasada subasta de Christie's en Nueva York cerró con la venta de un diamante de 50.01 quilates por más de 10 millones de dólares, adquirido por el joyero Laurence Graff.
La tendencia para 2013 después de un año lleno de registros batidos como este, apunta a que las piedras coloreadas seguirán al alza, teniendo en cuenta hallazgos como el de un diamante azul en Botswana, vendido ya en bruto por 4,5 millones y con un potencial de claridad grado VVS1. Pero aún falta pulirlo y sacarlo al mercado... según explican desde el laboratorio gemológico hebreo.
*Resumen del informe de Guy Borenstein. GemWizard.
