En estas piezas artesanales, los metales preciosos se combinan con el cuero, perlas y piedras naturales. Aparte de sus colecciones intemporales, de más de 200 piezas, los joyeros barceloneses ofrecen también productos a medida para los amantes de la joyería. La empresa da mucha importancia a la artesanía de la joyería tradicional especial, que se transmite en la familia.
Desde un pequeño taller artesano, creado en 1953, pasando por la joyería de unos grandes almacenes, aprendiendo de los discípulos de su padre, Josep Uró fue creando su arte en el mundo de la joyería. Sus joyas han demostrado su espíritu: innovador y atrevido. El talento artístico de la familia ha ido pasando de generación en generación. Imma Uró, una de sus hijas, continua con el oficio y ha seguido creando joyas de estilo único y personalizado.
