La sesión plenaria propuso la siguiente defición: "diamantes relacionados con la violencia en áreas de producción y comercialización de diamantes en bruto", la cual es más específica y amplia que la inicial, registrada hace prácticamente una década.
"El Consejo Mundial del Diamante no se estableció para proteger los intereses de las industria del diamante en una campaña contra la evolución de los "diamantes del conflicto", aunque está claro que era de nuestro interés que los diamantes conflictivos han de ser eliminados de la faz de la tierra", dijo Eli Izhakoff , el Presidente del Consejo Mundial del Diamante.
"Rechazamos que el producto al que hemos dedicado nuestras carreras, sea utilizado como un agente del sufrimiento y la opresión. Bajo ninguna circunstancia el diamante debe asociarse con la violencia colectiva contra las comunidades", añadió Izhakoff.