Espaijoia revivió el interés del Sector por las ferias en Barcelona

El joyero barcelonés volvió a acercarse a una feria del Sector.  Casi una década después de la desaparición de Barnajoya, la Ciudad Condal acogió Espaijoia, una singular iniciativa que ha vuelto a poner la oferta de empresas y diseñadores a disposición de los profesionales barceloneses y de quienes se han acercado a conocerla. Más de 60 expositores entre los que se contaban diseñadores individuales, empresas  fabricantes, mayoristas y proveedores de servicios ocuparon la alta nave de la Sala Comillas. En este marco renacentista las joyas lucieron aún más como objetos de belleza y permitieron que las transacciones comerciales, que se dieron y en profusión, se realizaran en un ambiente distendido, relajado y que invitaba a la comunicación.  Los resultados, a falta de datos oficiales de cierre parcen ser altamente positivos. Una afluencia de visitantes incluso superior a las previsiones más optimistas, un movimiento comercial también desusado para los tiempos en que estamos, y sobre todo, una oportunidad de conocimiento y contactos que también ha ido por delante de las expectativas.
Con estas conclusiones, aunque sean provisionales, ya se empiezan a establecer las bases para ediciones futuras, barajándose la posibilidad de acercar y hacer converger las tres grandes citas paralelas que la joyería tiene en Barcelona en el mes de septimbre. Por una parte y como evento matriz, la propia Espaijoia, que podría celebrarse en el mismo ámbito pues todavía queda espacio disponible para una importante ampliación. Al mismo tiempo, la Misión Comercial de Joyería Cordobesa, que ha celebrado su segunda edición en parallo con Espaijoia, podría, si se cumplen las previsiones, hacerlo el año próximo en una ubicación práticamente adyacente a ésta, con lo que se convertirían en dos ofertas paralelas y complementarias. Finalmente, fuentes de la organización de Espaijoia declaran que la de Joya, el encuentro de diseño de joyería que organiza el FAD estaría también interesada en hacer coincidir las fechas, aunque celebrándolo en su recinto habitual, no muy lejano por otra parte de las Drassanes.
En conjunto, la primera edición de Espaijoia puede convertirse en el embrión de unas Jornadas de la Joyería en Barcelona, logradas mediante la sinergia de distintas entidades, muy vinculadas al propo Sector, o demandas directamente de éste, que recuperarían la tradición ferial barcelonesa en el ámbito de la joyería.