El asalto a la joyería de la calle Ayala, casi esquina con Velázquez, en la denominada 'Milla de Oro Madrileña' ocurrió el pasado sábado, poco después de que abriera al público. Al parecer, tras amenazar al joyero con armas blancas y rociarle con spray de pimienta, los dos asaltantes --supuestamente de nacionalidad serbia-- se abalanzaron sobre la hija del joyero que, en ese momento, aprovechó para echar mano del revólver que guardaba y dispararlo contra los delincuentes.
Uno de ellos logró salió huyendo, mientras el otro intentó tomar un taxi cercano hasta que el conductor, tras detectar el estado en que se encontraba (sangrando abundantemente, según los testigos), alertó al Samur y a la Policía. Horas más tarde el segundo asaltante fue también detenido cuando acudía a un centro médico con heridas de bala.
El herido, de 30 años y nacionalidad serbia, se presentó con dos heridas de bala en el tórax y en la ingle a la altura de la femoral y fue ingresado en el Hospital Universitario de la Paz con pronóstico grave, después de que los facultativos del Samur pudieran estabilizarlo.
Tras prestar declaración ante el juez, cabe la posibilidad de que se estime que el imputado actuó en legítima defensa frente a los asaltantes. Un caso que, como en buena parte de los ocurridos en los últimos años en España, es probable que se cierre sin llegar a jucio.
