Con esta elevada cifra, la casa ginebrina cierra el mes de noviembre con un acumulado superior a los 150 millones de euros, entre todas las subastas celebradas en lo que va de año. El líder indiscutible de la audición fue un extraordinario y raro diamante azul, en talla fancy, que alcanzó los 8,5 millones de euros. Se trata también de un precio record de subasta para un diamante de estas características.
Esta fue la pieza estrella en una subasta de piedras coloreadas que no se había visto en los últimos 20 años en la sala ginebrina. La calidad de los zafiros, rubís o esmeraldas permitió alcanzar precios elevados.