La asociación ACAJA, que preside Christine Vasseur, tiene como fines promover, estimular, investigar y difundir el conocimiento de la evolución histórica de las joyas, de los adornos con metales, de las materias orgánicas y gemológicas de las joyas y las alhajas relativas a la indumentaria y al patrimonio etnológico.
“La búsqueda de oro y plata se convirtió en uno de los motores de la colonización y los metales preciosos se convirtieron en uno de los elementos clave de la economía española durante los siglos XVI, XII, XVIII. Durante el período entre 1590 y 1620, la llegada del metal precioso americano alcanzó su cénit, para luego comenzar una fase de fuerte contracción. El oro en las culturas prehispánicas tenía un uso ritual y de prestigio equiparable a los textiles o los adornos de plumas”, con esa presentación, ACAJA llama a los amantes de las joyas y de la historia de estas a un apasionante recorrido por las salas del Museo de América.
La visita guiada tendrá lugar mañana, y se ha citado a los interesados en el propio museo, situado en el número 6 de la Avenida Reyes Católicos. Para apuntarse a la visita escribir a amigosjoyasyalhajas@gmail.com
El Museo de América fue creado en 1941 y su colección está formada por más de 25.000 objetos. El Museo alberga piezas precolombinas, etnográficas y coloniales. Las colecciones más antiguas pertenecen al Real Gabinete de Historia Natural fundado a mediados del siglo XVIII. En 1771 Carlos III creó un nuevo Gabinete al que se incorporaron piezas procedentes de las primeras excavaciones arqueológicas realizadas en América así como objetos etnográficos recogidos en las expediciones científicas. En 1868 estas colecciones pasaron al recién fundado Museo Arqueológico Nacional. A partir de ese momento las compras y donaciones contribuyeron a incrementar estas colecciones americanas. En 1941 se fundó el Museo de América y en la segunda mitad del siglo XX aumentaron de manera notable las colecciones de arte colonial, a la vez que se fueron adquiriendo diversos materiales precolombinos y etnográficos. Mientras se construía el actual edificio, el Museo de América abrió sus salas dentro del Museo Arqueológico Nacional. En 1965 se inauguró su nueva y actual sede.