El informe Global Fraud Index recoge los datos proporcionados por empresas y por las principales pasarelas de pago online, y muestra cómo los contracargos (rechazo del cliente a una operación) han aumentado y se sitúan en un promedio de 684 dólares. La industria joyera tiene las tasas más altas de ‘fraude amistoso’ para pedidos superiores a 500 dólares, situándose aproximadamente en el 0,24% según este informe.
Pero, ¿en qué consiste el ‘fraude amistoso’?. Se trata de un cliente habitual, que compra con frecuencia y con un histórico de gasto en el e-commerce, pero que por alguna razón decide no reconocer alguna de las transacciones y denuncia la falta de conocimiento al respecto.
Es una tipología muy difícil de detectar y aún no es mayoritaria en España, dado que resulta complicado acudir al banco alegando desconocimiento de la operación y que hagan un contra cargo de fraude.
Esta práctica es más frecuente en otros países según la Asociación de Empresas Españolas contra el fraude, pero a la hora de emprender la venta a través de internet hay que tener en cuenta los riesgos de estar abierto al mercado global y no todos los países y entidades bancarias tienen las mismas políticas que las españolas, recuerdan.
Comportamiento del comercio online de joyas y relojes
El informe también refleja la evolución de la venta a través de internet y muestra cómo la industria joyera enfrentó fortunas dispares en el primer semestre de 2017 (últimos datos disponibles). La mayoría de los minoristas tradicionales tuvieron otro periodo de ventas deslucidas, mientras que otros sí recibieron un impulso de sus números online.
Este es el caso de De Beers, que en su marca minorista Forevermark muestra una tendencia creciente en la que los millennials están comprando diamantes, aunque más pequeños, y observó un aumento en los arrendamientos de joyas con diamantes.
Por su parte marcas potentes como Tiffany & Co. y Signet sí que experimientaron tanto un declive en las tiendas físicas como en el canal online. Los relojes de lujo enfrentaron desafíos similares, aunque el mercado secundario online para los relojes suizos continúa creciendo según la consultora.
“Después de años de crecimiento basados en el suministro a mayoristas y minoristas, pero sin aumentar las ventas a los consumidores, los relojeros de lujo se ven obligados a suministrar a sitios de reventa online que comercializan productos oficiales, pero con grandes descuentos”, añaden.