En su informe, el Instituto Gemológico de América (GIA) novela que " hombre de gran gusto, Tammaro, eligió el anillo perfecto para una fulgurante princesa". Se trata de un excepcional 'sangre de pichón' enmarcado en diamantes y montado sobre un anillo de oro. "Si encontrar un diamante de más de cinco quilates es bastante complicado hoy día, este que supera los ocho es algo inaudito", añaden desde el Instituto.
Más piezas de record
El anillo está valorado entre 5,3 y 8 millones de euros pero aún así no es ni el más grande, ni el más caro que la firma de subastas ha vendido en el último año. En noviembre de 2014 la casa suiza cerró la venta del Graff Rubi por 8,6 millones de dólares, lo que rozaba casi el millón (997,727) de dólares por quilate.
Y es que la barrera sicológica de superar el millón de dólares por quilate sólo lo habían conseguido los diamantes más excepcionales, pero ninguna piedra de color. Pero eso cambió el pasado mes de mayo también bajo el martillo de Sothebys, cuando vendió por 30 millones de dólares el imponente Sunrise Rubí, una piedra de 25,59 quilates que, esta vez sí, superó ampliamente esa línea al alcanzar un precio por quilate de 1.185.451 dólares.
El Graff Rubí
El Sunrise Rubí
