A nivel general, Richemont terminó el primer trimestre con ventas de 5.412 millones de euros
El sector de la joyería continúa mostrando resultados positivos para los grandes grupos de lujo. Un ejemplo de ello es Richemont, que reporta un aumento en sus cifras al finalizar el primer trimestre, impulsado específicamente por sus marcas de joyería.
Los datos de los tres primeros meses de ejercicio de la compañía suiza, que finalizaron el 30 de junio, han sido recientemente revelados. Este periodo ha superado ligeramente las expectativas de los analistas, impulsado por un crecimiento del 3% gracias al sólido desempeño en su división de joyería, aunque se vio algo afectado por el rendimiento de las marcas de relojería.
Richemont ha finalizado el primer trimestre con ventas que alcanzan los 5.412 millones de euros, un aumento respecto a los 5.268 millones de euros del mismo periodo en 2024. Esto ocurre a pesar de la debilidad en las ventas en China, que impacta de manera general al sector del lujo, así como de la creciente presión arancelaria que afecta a la industria de la relojería.
Así es que, y tal y como indican desde la compañía, en un “volátil entorno macroeconómico y geopolítico“, el grueso de su negocio se concentra en la joyería. Con ventas de 3.914 millones de euros, la división de joyería de Richemont, con marcas como Buccellati, Cartier o Van Cleef & Arpels, ha anotado un crecimiento del 11% en el primer trimestre. Se trata, según destaca la empresa, del “tercer trimestre consecutivo de crecimiento a doble dígito”.
A pesar de la complicada situación actual, la relojería ha visto una disminución en sus ventas del 7%, alcanzando los 824 millones de euros. Según indican desde Richemont, esta caída se atribuye a un retroceso en mercados como China, Hong Kong y Macao, así como en Japón; sin embargo, el grupo señala que el crecimiento en América ha ayudado a compensar estas pérdidas.