Lunes 13 de junio de 2016
Goldtime
La
ONG Global Witness acaba de publicar un
preocupante informe en el que denuncia cómo los talibanes de Afganistan y otros grupos armados vinculados al
Estado Islámico controlan las importantes minas de lapislázuli al noroeste del país y estarían generando unos beneficios ilegales de en torno a los 20 millones de dólares anuales para financiarse.