www.goldandtime.org

OPINIÓN | Miguel Ángel Pellicer

Y ahora… los diamantes híbridos

miércoles 06 de septiembre de 2017, 07:00h
Miguel Ángel Pellicer
Miguel Ángel Pellicer
Cuando parecía que el mundo del diamante se había reducido a la posible disyuntiva o competencia entre diamante natural y diamante sintético, resulta que un nuevo invitado se cuela en la fiesta, aparece lo que algunos llaman diamantes híbridos.

Pero, ¿qué son estos denominados diamantes híbridos? Se han llamado así a aquellos que están formados por un diamante natural y una capa de diamante sintético. Normalmente la mayor parte de la gema es natural pero una fina capa, la superior, está obtenida mediante el método CVD. En realidad es un crecimiento de diamante sintético CVD sobre un diamante natural.

¿Qué se consigue con la adicción de esta fina capa? Puede tener varios objetivos: El primero y más lógico es el aumento de peso. Se podría decir que es un tratamiento que aumenta el peso, si bien en pequeña medida hasta ahora.

El segundo, un cambio de color, ya que si la fina capa de diamante sintético es de un color determinado, el aspecto final del diamante completo sería el del color de esa fina capa, es decir, se trataría de una tratamiento que modifica el color.

Una aparición no tan novedosa

El hecho en sí no es nuevo. La novedad reside en que se hace sobre el diamante y en el método de crecimiento de la capa fina, por ahora, sintética. Recuérdense, por ejemplo, los dobletes de zafiro o de rubí realizados con material sintético sobre el natural, con la diferencia de que en lugar de un pegamento, en estos diamantes híbridos se aplica un crecimiento cristalino, algo que tampoco es novedoso, ya que en sus orígenes la esmeralda sintética Lechleitner era algo parecido: Un crecimiento cristalino de esmeralda sintética sobre una gema natural.

También se conoce desde hace relativamente cierto tiempo la existencia de recubrimientos con diamante sobre cuarzos y sobre esmeraldas, e introducidos en el mercado con distintos nombres comerciales.
Como se puede apreciar, la imaginación humana no tiene límites a la hora de aplicar las nuevas tecnologías y los nuevos descubrimientos científicos, unas veces con sanas intenciones y, otras, se puede decir que no tanto.

Frente a estas nuevas apariciones siempre nos queda la confianza en el proveedor y en los laboratorios altamente cualificados para obtener la información precisa en caso de duda. Dudas que surgen con mayor frecuencia conforme disminuye la confianza en la procedencia de las gemas.

Miguel Ángel Pellicer es gemólogo y presidente de AGEDA Aragón