Por tipo de material el mayor varapalo se lo llevaron los relojes hechos en metales preciosos, con una caída del 14%. Le siguen los de acero, también con un revés del 13%, aunque los realizados en otros metales consiguieron un repunte de 4 puntos.
Por valor caen todos excepto los que se sitúan en la horquilla de los 500-3000 francos. Este tipo de relojes consiguió elevar sus ventas un 3,9%, mientras los de gama superior descendieron un 14% y los de menos valor (200-500) cayeron un 6,5.
Como ya venimos contando desde hace meses, la frenada del mercado asiático es uno de los principales motivos que explican las caídas del mercado exportador suizo, además de la fortaleza del franco. Hong Kong se dejó un 17% en las compras de relojes, mientras China continental sufrió un agudo descenso del 36%.
En general, los principales mercados sufrieron descensos, o subidas muy moderadas, como el caso de Estados Unidos, que muestra un tímido ascenso del 1,3% o de Reino Unido, con un 3,4%. En el lado contrario se sitúan Alemania (-14%), Italia (-13%) y España con un importante descenso del 24% y unas importaciones de 34 millones de euros.
